Por: Héctor Camacho Aular
Cuando la fuerza creativa de un compositor es capaz de penetrar con facilidad en los enredos melódicos de su arte, no cabe la menor duda de que el éxito no se hará esperar. Así ocurre con el músico margariteño Chelique Sarabia, nacido en La Asunción, el 13 de marzo de 1940, quién con el correr del tiempo se convertiría en uno de los autores de música popular venezolana más exitoso del pasado siglo XX. En 1955, cuando apenas estaba cumpliendo 15 años compone el vals Ansiedad (“Ansiedad/de tenerte en mis brazos/musitando palabras de amor/…”), luego de haber visto la película mexicana, con el mismo título, protagonizada por Libertad Lamarque y Pedro Infante. Al poco tiempo, el cantante oriental Rafael Montaño sería el primero en grabarlo y lo incluiría en la grabación de su larga duración, patrocinado por la Marina venezolana. Cuatro años más tarde, el pianista y cantante norteamericano Nat King Cole lleva también el vals Ansiedad al acetato, en su famoso LP “Nat King Cole. A mis amigos” (Capitol Record, 1959). Con el correr de los años, ésta canción se ha convertido en una de las composiciones venezolanas más versionada a escala mundial, aparte de haber sido grabada en varios idiomas.
En el inventario musical de Chelique Sarabia figuran de su autoría más de dos mil temas muchos de ellos están inspirados en originales anécdotas y ocurrencias. Uno de ellos, según nos apunta el analista musical Raúl Gutiérrez Hurtado, lo realiza durante un viaje que hiciera, en compañía de Cherry Navarro, desde Caracas hasta Valencia para visitar a un amigo enfermo. En el trayecto su acompañante no paraba de hablar y fue entonces cuando el compositor exclamó: “Por favor cállate, necesito pensar”. Inmediatamente, sacó de la guantera del carro una libreta y un lápiz, para comenzar a escribir: “Necesito pensar/ déjame solo/no lo tomes a mal/por Dios, déjame solo/…”)…”. Al arribar a la ciudad de Valencia ya estaba lista aquella composición. Posteriormente en el año 1964, el meditado tema Necesito pensar fue grabado e incluido en el LP “Rosa Virginia y Chelique Srabia. Un momento contigo”. (Palacio) y en el larga duración “Chelique Sarabia presenta a su nueva voz: Cherry Navarro” (Palacio, 1964).
A mediados de los años sesenta, el cantante puertorriqueño Chucho Avellanet es contratado para presentarse en Venezuela en el prestigioso Show de Renny. Para entonces, Chelique Sarabia era el contratista musical de dicho espacio. En el día de la actuación surgió un problema, en horas de la tarde, relacionado con el pago del artista que rápidamente fue solventado. Cuando el cantante se encontró en los estudios del canal con el inquieto Chelique, le dice:” Tranquilo amigo ya todo está resuelto, no te muerdas los labios” y él responde:”Voy a componer una canción con ese nombre y tú la vas a estrenar”. Poco después, el vals No te muerdas los labios (No te muerdas los labios/se te nota intranquilo/Quieres decirme algo/Y sé que no has podido/…”) seria grabado por éste cantante y forma parte de su inolvidable larga duración “Chucho Avellanet en Venezuela” (Palacio, 1964).
Una de las composiciones preferidas de Chelique Sarabia, según lo expresara el propio autor en un programa de televisión, ha sido su tema Cuando no sé de ti (“Cuando no sé de ti/te quiero mucho más/porque en sueños te vi/dos lágrimas brotar/…”), interpretado por la tierna voz de Rosa Virginia Chacín, realizado en homenaje al vals Isabel, con letra de Ernesto Luis Rodríguez y música de Juan Vicente Torrealba). Cuando lo escuchó el maestro Torrealba inmediatamente llamó a Chelique, para decirle: “Me gustó muchísimo tu canción” y el autor respondió: “Claro que tiene que gustarte, es hija tuya”.
Chellique Sarabia, con su arsenal de composiciones llenas de profundo orgullo patrio no se cansa de repetir a los admiradores de su arte que “somos un sol de esperanza pintado de vino tinto”.
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