*Con un acercamiento
al patrimonio local, a cargo del cronista de la Universidad Nacional
Experimental del Yaracuy, Antonio Rivero, se dio inicio a esta nueva oferta de
formación en el área del turismo.
Con
el propósito de desarrollar habilidades para el diseño de rutas turísticas
desde las buenas prácticas ambientales, culturales y de responsabilidad
sociocomunitaria, con un enfoque crítico, creativo y sensible, el Centro de
Estudios para la Hospitalidad y el Turismo (Cehotur), de la Universidad
Nacional Experimental del Yaracuy (UNEY), dio inicio a su más reciente oferta
de estudios: el Diplomado en Diseño de Rutas Turísticas.
En
nombre de las autoridades de la institución, la coordinadora del Cehotur,
Maryely Martín, dio la bienvenida a un heterogéneo grupo de participantes, de
diversas áreas del conocimiento, durante el primer encuentro de este nuevo
programa de estudios que tendrá una duración de 12 semanas, con 148 horas de
formación distribuidas en seis módulos.
Martín
explicó el cronograma de actividades, el plan de estudios, se refirió a los
docentes que tendrán la responsabilidad de administrar los diversos módulos e
hizo una introducción a cada uno de ellos, mostrando las fortalezas del
Cehotur, como programa de vinculación social, para la formación de los
servidores de servicios turísticos de la región, con miras a potenciar la
oferta turística local.
Los
módulos que se desarrollarán serán: Modalidades turísticas: fomento de la
identidad territorial; Documentación de recursos y saberes locales; Premisas de
la protección integral en turismo; Diseño de rutas turísticas con identidad;
Comercialización de rutas turísticas, y El blog con propósitos turísticos,
todos con una orientación teórico-práctica, con apoyo de docentes de la UNEY y
de Inparques Yaracuy.
Reflexiones sobre el
patrimonio
Para
el primer encuentro del diplomado, el profesor Antonio Rivero, docente,
investigador, maestrante en Historia de Venezuela y cronista de la UNEY,
efectuó con los participantes un conversatorio sobre el patrimonio venezolano,
en el que propició la reflexión sobre la riqueza histórica, cultural y humana,
además del valor que ésta pueda tener a la hora de diseñar rutas turísticas.
Rivero
invitó a valorar el patrimonio local a través de un acercamiento histórico,
pero también afectivo, y propició un recorrido documental por los monumentos,
las construcciones, los lugares, las tradiciones, las formaciones naturales y
culturales del estado Yaracuy, para encontrar esos valores que deben resonar
permanentemente entre todos los yaracuyanos.
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