El
presidente de la subcomisión de Recursos Naturales de la Asamblea Nacional
(AN), Luis Parra, aseveró este martes durante su intervención en el hemiciclo,
que la problemática del agua potable y saneamiento en el país es consecuencia
de la desinversión e ineficiencia en este sector.
“Las comunidades no protestan por gusto sino por necesidad. Tratan de
desviar la atención atribuyéndole las causas de la escasez generalizada del
vital líquido al fenómeno de El Niño, pero la verdad es que son víctimas de una
situación generada por este gobierno que ha manejado más de 400 millones de
dólares y hoy por las tuberías solo sale viento; ese niño tiene nombre, se
llama Nicolás Maduro en Venezuela, y Julio León en Yaracuy, ambos son los
responsables de esta crisis”, expresó.
Lamentó que las malas
políticas aplicadas por los organismos competentes las sufre y paga el pueblo.
“La bancada minoritaria que
vive de privilegios no entiende que el servicio está en emergencia, tampoco le
importa el drama que enfrentan a diario las familias que tienen que disponer de
más de 40% de sus ya diluidos ingresos por la inflación para adquirir agua
potable, ya sea a través de cisterna o botellones”, indicó.
Según Parra, la incapacidad
convirtió en un desierto nuestra nación.
“Es tarea de los gobiernos
garantizarle este recurso a la población, pero siguen dándole la espalda y hoy
nos tienen como en un desierto: sin agua y sin alimentos. La gente está
desesperada y quiere respuestas, el Gran Polo Patriótico es el rostro de la
crisis, no tiene moral, solo se convierte en obstáculo para impedir que se
puedan solventar las graves dificultades que atraviesa la sociedad”,
acotó.
El parlamentario solicitó la
comparecencia del ministro de Ecosocialismo y Aguas, Ernesto Paiva, funcionario
-que a su juicio-, ha hecho caso omiso a esta cruda realidad que afecta el
desenvolvimiento de las actividades cotidianas de más de 30 millones de
venezolanos.
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