Por
la certeza de reconocer la importancia que tiene la presencia activa del
cronista oficial para rescatar, preservar y difundir la memoria histórica de la
sociedad, los concejales del municipio La Trinidad, en uso de las atribuciones
legales que otorga la Ley Orgánica del Poder Público Municipal, sancionaron la
Ordenanza sobre la institución
del cronista, pero hasta la fecha ésta no ha sido promulgada por la Alcaldía de
esa jurisdicción yaracuyana.
Así lo dio a conocer Raúl Freytez, cronista
oficial del municipio San Felipe, tras su labor de impulsar la creación del
cronista en los municipios del estado Yaracuy, que no hayan legislado en torno
a la ordenanza de la institución del cronista, obtuvo un derecho de palabra en
sesión de la Cámara del municipio La Trinidad, donde se enteró que los
concejales en pleno sancionaron el documento legal desde principios del año
2015, con la salvedad de que no había sido decretado por la máxima autoridad
municipal, hecho que ha impedido el llamado a concurso para escoger al
funcionario idóneo para asumir esta trascendente responsabilidad, como
conciencia del pueblo, pues “el pueblo mismo es el cronista por excelencia”,
según argumentó hace 71 años Enrique Bernardo Núñez, primer cronista designado
oficialmente en Caracas el 15 de enero de 1945.
El llamado es a concienciar a los gerentes
municipales del estado Yaracuy a rescatar y resguardar el patrimonio histórico y
gentilicio de cada localidad, y en este sentido se declara de interés público
la misión encomendada al cronista municipal para que recopile, documente,
conserve y defienda las tradiciones, costumbres y hábitos sociales de la
comunidad, así como el patrimonio histórico y cultural en cualidad de órgano
auxiliar del Poder Público Municipal, tal como ya se hizo en los municipios
Peña, Independencia, San Felipe y Urachiche, y en la actualidad está siendo
considerado en las municipalidades de Sucre, Manuel Monge y Cocorote, y
próximamente en Nirgua, Bolívar y Sabana de Parra.
Además, la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela establece claramente la garantía de proteger,
preservar y enriquecer el patrimonio cultural, tangible e intangible, así como la
memoria histórica de la Nación; por lo que la protección del acervo histórico
de este municipio es salvaguardar también el acopio de información histórica de
la Patria porque La Trinidad forma parte de nuestro país, argumentó el cronista.
La ordenanza, sancionada a principios del año
2015, tiene por objeto regular la designación del cronista con competencia,
funcionamiento y atribuciones, formación y capacidad para la realización de
investigaciones pertinentes hacia el rescate y difusión de la historia,
tradiciones y costumbres, así como la reivindicación de los valores culturales,
patrimoniales, arquitectónicos y naturales del municipio La Trinidad con una
raigambre que data del año 1552 cuando era apenas una aldea conocida como
“Aurero” y posteriormente con el estatus de estancia ya con el nombre de
Boraure, en 1619, fundado por Alonso Martín Toboso, transcurriendo su tradición
cronológica hasta la actualidad cuando se reconocería como La Trinidad, por la
Ley de División Político Territorial en 1993, puntualizó Freytez.
Por su parte, el edil Nelson Castillo, presidente
del Concejo municipal de La Trinidad, en plenaria de concejales, indicó que
están al tanto de la relevancia que tiene para los pueblos la presencia activa
del cronista, ya que este funcionario público reflejará en sus crónicas todo
cuanto tenga que ver con la preservación de los recuerdos del pasado y presente,
asegurando la identidad como contrafuerte para valorar y transmitir el
patrimonio histórico, cultural, natural y humano a los escolares, docentes,
padres y al poblado en general, eternizando los recuerdos del colectivo para
ésta y las futuras generaciones, razón por la que legislaron para cumplir con la
responsabilidad otorgada por la ciudadanía trinidense.
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