Por: Héctor Camacho Aular. Fotografía: Equipo de voleibol "Macagua". Año 1964 (Cortesía de Ingeservicios Yaracuy C.A).
Para la segunda mitad del siglo XX, las misas de aguinaldos en la ciudad capital yaracuyana eran celebradas, puntualmente a las 4 am, en la histórica Iglesia Matriz de San Felipe, donde la feligresía acudía con fe y entusiasmo a estos oficios religiosos, los cuales eran amenizados por el conjunto de aguinaldos El Redentor, dirigido por Jacobo Gil. Al terminar la misa, los asistentes tenían como costumbre quedarse en los alrededores de la Plaza Bolívar o bien trasladarse a pié a la avenida La Patria y seguir hasta la redoma del Indio Yaracuy, para presenciar las carreras de patines que realizaban los jóvenes de la época. Otros en cambio, optaban por ir al Mercado Municipal sanfelipeño, para deleitarse con las empanadas rellenas y el sabroso frito, que preparaba y vendía Nicasio Mena en su famoso kiosco.
A principios de los años sesenta, se realizan en la manga “Alberto Domínguez”, ubicada en la segunda avenida, entre la redoma de la avenida La Patria y la calle 13, las primeras madrugadas de toros coleados en San Felipe, donde se contó con la presencia de los mejores coleadores del estado y de destacados novatos de la región, para deleite de los aficionados que llenaban los palcos y talanqueras de aquel recinto taurino. Además en dicho espectáculo se presentaba el conjunto criollo Los Copleros del Centro, comandado por Franklin Sánchez y, en algunas ocasiones, lo hacía la Banda del estado Yaracuy, dirigida por Manuel Alvarado. También por ésta década revolucionaria un grupo de entusiastas del voleibol, liderizado por el profesor Aulio Rovero, el popular “Roverito” y otros amigos, concretan la idea de organizar un torneo decembrino de éste deporte a primeras horas de la mañana en la Cancha Popular de la ciudad, situada en la segunda avenida, enfrente de la manga de coleo, entre las calles 15 y 16. Al principio, se inicia con la participación del equipo Valle de Aroa quien juega sus encuentros con un uniforme verde y letras blancas (obtenido gracias a los buenos oficios realizados por Francisco “Paco” García, en el Instituto Agrario Nacional), ante varios equipos citadinos escogidos para la ocasión.
Un año después, es inaugurado formalmente el esperado torneo navideño de voleibol, con la presencia de cuatro equipos participantes: Macagua (exhibiendo siempre en sus presentaciones un moderno uniforme negro con letras amarillas),dirigido por Carlos Huerta, teniendo como mateadores a Esteban “Planchón” Garrido (famoso por su contundente remate en forma de gancho unido a su forma particular de flotar en las jugadas que intervenía), Rolando Guevara, Raúl Rodríguez Camacaro, Orson Serrano y Omar García y, como ponedores, Horacio Elorza y Jacobo Gil, además tenían como madrina a la traviesa “macagüita” Yadira Huerta Venot; Malta Caracas, conformado por Flaminio Prado, Félix Alvarado, Silverio Rodríguez Camacaro, José Muñoz Gutiérrez, Luis Silva, Ángel “Guayapi” Alvarez, entre otros; el aguerrido San Pablo, constituido por Pedro Raga (escurridizo mateador que jugaba descalzo), Carlos Azo, Juan Barrios, Edgar López, Agustín Pérez, Hugo Gutiérrez Zambrano, Rubén Pérez, Orson López, Wladimir Parra, Raúl Ortega y otros más. Por último, el temible Guama integrado, entre otros, por Alirio Mendoza, Hugo Calvette, Octavio “Manare” Jayaro, José López, Silvio González, Ramón Parra Pinto, Luís Mendoza, Francisco Mosquera, José Ramón Prado y Oswaldo “Guayo” López. Es de notar que, en todos los torneos navideños de voleibol que se organizaron en San Felipe en los años sesenta, siempre salió victorioso el poderoso equipo de Macagua.
En diciembre de 1972, se juega el último encuentro de voleibol navideño madrugador en la Cancha Popular, ésta vez, entre Jóvenes del 37 y el equipo de San Pablo, siendo arbitrado dicho juego por Clemente Pérez Alvarado, resultando ganador la selección de Jóvenes del 37. Es bueno señalar que, en otros distritos del estado también se celebraron, en los años 60, similares campeonatos decembrinos de dicho deporte, tal es el caso de los realizados en Urachiche, bajo la coordinación del profesor Noel Delgado, en la cancha del Grupo Escolar “Jacinto Gutiérrez Coll”, con la participación de los equipos: Cantaclaro, SAU (Sociedad Amigos de Urachiche), Volcán y Halcones.
El amplio salón de las memorias del voleibol yaracuyano desde sus inicios hasta el presente está lleno de triunfos, enseñanzas, galardones y anécdotas, que solo esperan el pitazo inicial para darlas a conocer. De allí que lo narrado anteriormente, sea solo una pequeña obertura para dar a conocer después la gran obra que nos ha dejado éste deporte en el estado.
Que bueno es conocer de las costumbres de nuestro San Felipe a través de estas historias tan amenas y bien relatadas. Que sigan sus relatos, apreciado amigo Tico
ResponderEliminarSaludos estimado amigo de andanzas por jobito y sus alrededores. Muy bueno, 19,5 pts.
ResponderEliminarGracias estimado amigo Héctor "Tico" Camacho Aular por tus Remembranzas que nos hacen recordar esa bella y sana infancia, que tuve yo en particular hasta Diciembre 1962, pues ya al siguiente año emigramos los últimos que quedábamos de la Familia en San Felipe, mi madre Carmen, Freddy y Yo hacía la Ciudad mal llamada de Los Techos Rojos, pero esto no impidió que cualquier día festivo escaparnos hacia el terruño que nos vio nacer.
ResponderEliminarBuenos recuerdos
ResponderEliminarExcelente artículo. Hace trasladar uno al pasado.gracias.
ResponderEliminarMuchas gracias por está publicación, allí se resume con excelente descripción muy buena parte de nuestro gentilicio Yaracuyano y esa extraordinaria manera de ser Sanfelipeno.
ResponderEliminarExcelente artículo. Gracias Tico. Felicitaciones.
ResponderEliminarExcelente artículo Don Tico y más aún cuando al leerlo veo el nombre de mi Padre Orson Serrano QEPD, gracias
ResponderEliminarFelicitaciones a Héctor Camacho Aular por excelente trabajo que de recuerdos de aquellos tiempo
ResponderEliminarQue.recuerdos.inolvidables.yo disfrute mucho después.que salía de la misa.saludos Hector
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