EL TRABAJO ARMONIOSO DE HARRY RAMOS

Por: Héctor Camacho Aular.

     Los caminos frondosos de la música no se cansan de mostrarnos, cada día, el trabajo ejemplar realizado por destacados músicos, donde dan a conocer su actividad innovadora y perseverante transitada por los prados luminosos de la melodía y la armonía. De allí la justa necesidad de divulgar, con orgullo, su digno oficio ejercido y de ésta manera “darle voz a los silencios de nuestra historia. Dar vida al pasado para que tengan vida el presente y el futuro”, tal como lo dijera el escritor Carlos Fuentes, al recibir el premio de literatura “Rómulo Gallegos” en el año 1977.

   Uno de estos personajes a quien merece resaltar su trayectoria musical es la del venezolano Harry Ramos Acosta, nacido en San Felipe, Yaracuy, el 30 de septiembre de 1958. Formalmente, sus primeras apariciones en el escenario sonoro las realiza en su ciudad natal, como ejecutante de la guitarra eléctrica con la agrupación bailable Grupo Variedad, dirigida por Ramón Vargas, donde logra grabar varios discos de 45 rpm, incluyendo su composición: Sudor campesino. Más adelante, en 1983, sería el tecladista de la orquesta Nueva Imagen, fundada por el cocoroteño Andrés Meleán.

   Con paso firme y decidido, Harry Ramos en el año 1977, culmina sus estudios de  secundaria en la Escuela Normal “Miguel José Sanz” del estado Lara, donde recibe el título de Bachiller Docente, mención Educación Musical. Años después, en 2008, obtiene el grado de Licenciado en Educación, mención Desarrollo Cultural, en la Universidad “Simón Rodríguez”. Su decidida pasión por el arte de la música lo lleva a realizar varios cursos de actualización, dictados por renombrados expertos en la materia. Entre estos resaltan; Piano clásico con el profesor Omar Gómez, en la Escuela “Blanca Estrella de Méscoli” de San Felipe. Seguidamente, cursa Armonía y Composición con el maestro Juan Soublette, en la ciudad de Maracay. Además, recibe clases de Piano Jazz y Armonía Moderna, con el reconocido experto Jerry Weil. Finalmente, viaja a Norteamérica para estudiar, desde 1989 hasta 1993, ejecución de Piano Jazz, Arreglos y Música Sintetizada en Berklee College of Music, Boston, Massachusetts.

   De regreso a Venezuela comienza a divulgar, con orgullo y pasión, todo lo aprendido anteriormente y en su nueva faceta interviene en múltiples actividades relacionadas con la música. Entre éstas, destaca la de pianista y arreglista de la orquesta Los Melódicos” (1995-1997); director de la Escuela de Música “Blanca Estrella de >Méscoli” de San Felipe (1997-1998); arreglista del “Cancionero Popular Yaracuyano. Volumen I” (IACEY, 1993); pianista en la grabación del CD “Machito y su Banda Vida. El Niño Caballero” (1999); docente de Lenguaje Musical, Piano y Armonía, en la Universidad Experimental “Francisco de Miranda” (2012). A lo antes expuesto, habría que agregar su trabajo desarrollado en México como director y pianista de la banda de música caribeña “Bonche Social Club” (2017)  y ejercer, al año siguiente,  el rol de productor y arreglista, para el estudio de grabación Indemex.

   En la actualidad, Harry Ramos se desempeña como docente musical en la Universidad “Tito Puente” de Puebla, México; en las áreas de Armonía, Arreglos, Composición, Solfeo y Entrenamiento Auditivo.

   Todo lo narrado anteriormente sobre éste talentoso músico venezolano, nos lleva a exclamar en voz alta y  con mucho orgullo: ¡Del Yaracuy tenía que ser¡